domingo, 30 de agosto de 2009

True Blood, la cotidianidad del vampirismo


Shame on me, no lo había descubierto hasta hace muy poco, y es que aunque soy seguidor de las historias de vampiros el que miles de adolescentes estén en la onda de twiligth y se crean más expertos que Bram Stoker, le había quitado ya el sabor a la cuestión.
Pero la historia de Sookie Stackhouse no es para nada como lo antes visto, ¿y que tiene esta serie transmitida por HBO, que tiene embrujados a más de 3.8 millones de personas en el mundo? (se considera el gran éxito de la cadena desde Los Sopranos), a mi parecer es la forma satírica en que logra Allan Ball expresar toda la xenofobia, el racismo y el fundamentalismo religioso que abunda en gran parte de los EEUU. (no quiere decir que no haya en otros países).
Basado en los libros The Southern Vampire Mysteries de Charlaine Harris, esta serie nos cuenta la historia de Sookie, una linda chica de un pueblo ficticio en Luisiana, a la que muchos a primera vista podrían catalogar de la típica rubia poco inteligente, la cual trabaja como mesera en el Merlotte's, el bar del pueblo. Ella ha afrontado muy bien el hecho que hace poco más de dos años los vampiros se han revelado a la luz pública, luego que crearan un sustituto sintético de la sangre llamado True Blood, tanto es así que es de las primeras en el pueblo que logra hacer una relación amistosa con uno de los chupasangres.
Pero como decía en lineas anteriores este no es el principal atractivo de la serie, que no por eso deja de ser un atractivo, sino la forma en que los Rednecks del pueblo no dejan de expresar su odio y desprecio sobre todo aquello que le es nuevo o que simplemente no logran comprender, tal cual como ocurrió en otras épocas contra cualquier otra cultura y que aún sigue pasando frente al asombro de unos pocos. La verdadera reflexión de la serie, no es que el amor trasciende las diferencias culturales, raciales e incluso la muerte, sino que no importa cuan buenos o malvados sean los que conozcamos, los humanos siempre tendremos una mejor y más efectiva manera de odiar. Al final terminamos pensando que los únicos monstruos en la serie somos los humanos.
Eso es True Blood, sexo, sangre, humor negro y mucha música country, si aún no la ves no pierdas la oportunidad.

viernes, 28 de agosto de 2009

Hola mundo!!!


A buena hora me decido a abrir un Blog, después que la blogger-manía ha sido diezmada por sites donde puedes expresar lo que sientes con no más de quince palabras, pero simplemente no me conformo con lo que me ofrecen esos sitios, yo quiero sentir que mis pensamientos llegan a algún lugar y no conformarme con decir "Rafael is: *".
La razón: levantar la cara de entre el montón y gritar sobre lo que no nos gusta, sobre lo que nos gusta y no parece correcto y al fin sentirnos bien con nosotros mismos, al poner en armonía lo que creemos y lo que dejamos de decir (que es mucho más peligroso que lo que decimos). El aguacate cleptómano dice lo que tu no, ¿agradará? no importa, ¿molestará? a algunos, ¿será objetivo? nadie pretende serlo. Pero hoy decimos al mundo que nuestras palabras serán como las películas que vemos, Sucias pero certeras!!